Pasea por uno de los arcos que marcan la entrada al Anfiteatro Romano de Lucca y descubrirás una serie de edificios amarillos brillantes ordenados en forma de elipse, el cual es uno de los puntos de interés principales en este destino único. Intenta imaginar a los gladiadores armados que combatían a muerte contra enormes bestias para entretener a la ruidosa multitud. Este lugar tenía capacidad para 10,000 espectadores. La antigua estructura utilizada para los sanguinarios deportes de los gladiadores se convirtió más adelante en una base militar fortificada, un almacén, una prisión y, finalmente, en una bulliciosa plaza de la ciudad.
Observa las ruinas del Anfiteatro Romano como si fuera una especie de esqueleto arquitectónico incorporado a la ciudad contemporánea. Camina por el perímetro exterior en la Via dell’Anfiteatro para ver los muros originales. Actualmente, la mayoría de los cimientos originales están varios metros bajo tierra. En el interior, puedes encontrar la silueta de los edificios color pastel, agrupados en su característica forma de elipse, con los distintivos arcos cerca de la base.
Puedes llegar fácilmente a pie al Anfiteatro Romano, en donde podrás apreciar la gran historia de Lucca. La ciudad utiliza este sitio para organizar varios eventos al aire libre, como festivales de música, durante los meses cálidos. También es un buen lugar para hacer compras, con los mercados al aire libre y las tiendas de regalos que venden artículos típicos de la Toscana. Siempre hay algún tipo de actividad en este lugar. Puedes contemplar las hermosas fachadas de los edificios en cualquier día. Si tienes hambre, elige alguno de los restaurantes y las cafeterías de la plaza, que son excelentes sitios para observar a la gente y disfrutar la magia de esta hermosa ciudad.
El Anfiteatro Romano de Lucca es un sitio popular para visitar durante un recorrido por el sendero turístico de Lucca. Si prefieres evitar las multitudes, visita este lugar durante las primeras horas de la mañana o en la tarde. Desde aquí, puedes llegar caminando a otros lugares emblemáticos de Lucca, como la basílica de San Frediano o la iglesia de San Pedro Somaldi.