Para quienes buscan la belleza de Ibiza lejos de las multitudes que siempre están de fiesta, Cala Gració es el lugar perfecto. Siente la suave arena blanca entre tus dedos y nada en el mar Mediterráneo. La playa queda a una corta distancia a pie de San Antonio, que es a donde llegan varios transbordadores desde tierras continentales.
Está ubicada en la cabeza de playa de una profunda caleta que desciende suavemente hasta el mar. Es un lugar ideal para nadar porque sus aguas están bien protegidas contra olas grandes y corrientes fuertes. Mira cómo tus hijos construyen castillos de arena o se sumergen en el agua poco profunda para jugar con la pelota. Sumérgete con un visor y un esnórkel para que explores las áreas rocosas. Si miras con atención podrás ver pequeños peces y crustáceos en estas aguas transparentes. En temporada alta, renta un "pedalo" (lancha de pedales) en uno de los establecimientos que se ponen en la playa y recorre la bahía.
Las palmeras y pinos forman un bonito contraste con la arena blanca y las transparentes aguas color azul. Toma fotos de la caleta temprano por la mañana, antes de que lleguen las multitudes, y escala los riscos para que veas el paisaje sobre el agua.
Camina hasta el restaurante sobre la rocosa costera que llega ahí desde Cala Gració. Disfruta de las típicas tapas españolas, que te ofrecen platillos a base de pulpo, aceitunas y chorizo, o pide una paella con mariscos frescos.
Desde la playa podrás seguir la serpenteante vereda que va a San Antonio, a solo dos kilómetros (poco más de una milla) de distancia. Al ser la segunda población más grande de Ibiza, San Antonio ha establecido una reputación como la “Capital universal de los clubes de fiesta”, y ciertamente le queda bien ese nombre. El pueblo está dividido en tres partes principales: el conjunto de bares en West End, los clubes de Sunset Strip y el malecón de Passeig de ses Fonts, en el puerto.
Las temporadas más tranquilas para disfrutar de Cala Gració y sus alrededores son invierno, primavera y otoño. El verano es cuando cientos y cientos de turistas europeos inundan la zona. Si quieres experimentar la vida nocturna de San Antonio, realiza tu visita durante los meses de junio, julio, agosto y principios de septiembre.