La famosa aguja de la Catedral de Oslo ha sido una característica dominante del horizonte de edificios de la ciudad por más de 150 años. Hoy en día, la iglesia es famosa por su arquitectura y sus pinturas.
La iglesia data de 1697, aunque la aguja de bronce fue agregada en la década de 1850 cuando la iglesia fue reconstruida en el estilo neogótico. El edificio ha tenido extensas remodelaciones durante su historia, de acuerdo con las tendencias artísticas de la época. Ha ido del barroco al neogótico y del gótico, de regreso al barroco. Estos estilos puedes verlos en el arte y la arquitectura de la catedral.
Inspecciona el retablo, que sobrevivió del interior barroco original. Estudia sus esculturas de madera de Jesús con sus apóstoles y en la cruz. El púlpito y la fachada del órgano principal están diseñados con un estilo similar y formaron parte del interior original.
La iglesia es famosa por sus pinturas, particularmente los extensos murales en el techo de sus cuatro bóvedas. Éstos cubren un área de 1,500 metros cuadrados (16,146 pies cuadrados) y fueron pintados entre 1936 y 1950. Tómate tu tiempo para apreciar lo artístico de las escenas de historias del Viejo y del Nuevo Testamento.
En la sacristía mira una gran colección de retratos de todos los obispos de Oslo desde principios del siglo XVI. Para conocer más sobre las obras de arte y la historia de la catedral, reserva tu lugar en una visita guiada, la cual dura aproximadamente entre 45 minutos y una hora. Para conocer los detalles y los precios, visita el sitio web de la catedral.
Si visitas Oslo durante el verano, trata de asistir a uno de los conciertos de órgano que se llevan a cabo al medio día todos los sábados de julio y agosto. Hay boletos disponibles en la entrada poco antes de cada concierto.
La catedral está en la plaza Stortorvet, una de las principales plazas de Oslo, y puedes llegar fácilmente a través del transporte público.
La Catedral de Oslo está abierta para los visitantes todos los días, desde media mañana hasta media tarde. Los viernes permanece abierta durante la noche para las personas que deseen rezar o solo sentarse en silencio. Se permite tomar fotos en la catedral, aunque está prohibido el uso del flash. La entrada es gratuita.