La Fosa de los Osos es un recinto histórico en un parque donde estas majestuosas criaturas juegan, comen y nadan a la vista. Durante muchos años, el sitio era únicamente una gran fosa y otra más pequeña para los oseznos. Sin embargo, las fosas se incorporaron a un gran parque a lo largo del pintoresco escenario del río Aar.
Recorre la curva del río y alza la vista hacia el recinto de los osos, que está en una colina inclinada con césped, árboles y, en primavera, flores de narciso. Sube por las escaleras que bordean el parque hasta alcanzar un punto superior para disfrutar de una vista alternativa. Observa los osos que suben por las ramas y disfrutan de su amplio hábitat. Míralos cómo juegan en el agua.
Si vas en verano, los verás más activos. Al igual que los osos salvajes, ellos hibernan durante el invierno, por lo que casi no se mueven durante varios meses. Las fosas datan de 1857 y se restauraron varias veces a lo largo de los años para mejorar las condiciones de los osos. Los animales aún tienen acceso a la antigua fosa, aunque actualmente la pequeña se utiliza para eventos como fiestas de coctel.
Realiza una visita guiada de una hora por el parque por un precio razonable. Debes reservar con anticipación a través del sitio web del parque. Descubre la historia del oso y su papel en la cultura de Berna.
Los osos pardos viven en los bosques de Suiza desde hace miles de años. El oso es el símbolo de Berna desde hace varios siglos, gracias a una leyenda sobre el duque Berthold V de Zähringen del siglo XII.
El sendero que rodea el parque y el recinto siempre están abiertos. Por la mañana o por la tarde, cerca de la hora de comer, puedes hablar con los cuidadores de los osos.
La Fosa de los Osos se ubica en el extremo este del centro histórico, apenas pasando una curva del río Aar. Puedes llegar en el camión que para justo al lado del complejo de los osos.