La cascada Godafoss, un arco glorioso de cascadas de 30 metros (98 ft) de ancho, es una de las atracciones más famosas de Islandia. El rugido del agua que choca contra la superficie del río es tan impresionante como la belleza de la cascada. Sube a las rocas para disfrutar la vista desde arriba de las cascadas.
Camina por ambas orillas del río para ver la cascada desde diferentes ángulos. Baja a la base de las cascadas parada observar de cerca la pared de agua estruendosa que choca con el río. Toma fotos de las magníficas cascadas y el rocío que sube por las paredes del acantilado. Observa un arcoíris en los días soleados, cuando la brisa y la niebla dispersan la luz del sol en muchos colores.
Durante el invierno y la primavera, el río se congela parcialmente a los lados. Disfruta el ambiente tranquilo cuando toda la región se cubre de nieve y algunas partes de las cascadas se convierten en hielo. Durante el verano, recorre los senderos que pasan junto a las partes más hermosas de la cascada y disfruta un picnic en el césped.
Según la leyenda, a principios del siglo XI, el jefe de Islandia lanzó varias figuras de las deidades nórdicas a este río para renunciar a sus creencias y aceptar el cristianismo. Puedes ver esta historia representada en el panel de una ventana de la Iglesia de Akureyri.
Visita también la zona de Geitafoss, un conjunto de rápidos formados en este mismo río donde puedes ver el color blanco y turquesa del agua con gran intensidad. Para recargar tus energías después de caminar alrededor de las cascadas, dirígete al restaurante ubicado junto a la cascada principal.
La cascada Godafoss se encuentra en la región de Bardardalur, en la parte norte del país. Está a 5 horas de viaje en auto al este de Reikiavik, y a más de una hora al suroeste de Skinnastadur. Este sitio se encuentra junto a la gran carretera que forma un circuito y atraviesa la bella región volcánica de Myvatn. Hay un pequeño estacionamiento en la orilla este del río.
