Ubicada entre la Puerta de Pile y el Monasterio Franciscano, la Iglesia de San Salvador es una de las pocas estructuras que resistieron el terremoto de 1667. El pequeño y modesto edificio es conocido por su arquitectura renacentista que, según se dice, influyó en el diseño de otras iglesias de la región.
La iglesia está dedicada a Jesucristo y fue construida a principios del siglo XVI, como una muestra de gratitud por parte de los residentes de Dubrovnik tras sobrevivir al terremoto de 1520. La construcción que puedes ver en la actualidad cambió muy poco desde entonces.
Detente frente a la iglesia y observa sus detalles arquitectónicos o siéntate en la base de la Fuente de Onofrio justo frente a la puerta principal. Admira el rosetón dálmata clásico, una de las principales características de la fachada. Intenta leer la inscripción en latín que expresa la gratitud del pueblo por haber sido salvado. Debajo de la escritura hay una pequeña figura tallada de la cabeza de un ángel. En el arco sobre la puerta, podrás ver un desgastado monograma de Jesús. Puedes intentar adivinar las letras de este tradicional símbolo cristiano. Se trata de las primeras tres letras del nombre de Jesús en griego.
Observa los arcos ojivales sobre las ventanas en los laterales de la iglesia. Esta es una de las características góticas del edificio.
Entra a la iglesia y examina las pinturas y esculturas de imágenes religiosas. Levanta la mirada hacia la bóveda de crucería, otra característica gótica en el diseño de la iglesia. Dirígete al altar principal para observar el impresionante retablo. Siéntate en uno de las bancas de madera y disfruta de la paz y la tranquilidad, lejos de las calles atiborradas del centro histórico.
La Iglesia de San Salvador funciona como salón de exhibiciones y escenario de conciertos. El edificio está abierto todos los días y la entrada es gratuita. En algunas ocasiones, puede estar cerrado por eventos privados.
La iglesia está ubicada al inicio de Stradun, la calle principal del centro histórico.