El Museo Arqueológico de Alicante (también conocido por sus iniciales, MARQ), ha sido una de las atracciones más importantes de la ciudad desde que ganó el Premio al Museo Europeo del Año en 2004. Además de una interesante atracción turística, este museo cumple con funciones de investigación y educación, enfocándose en los procesos arqueológicos que se siguen para explorar la región. Está dividido en ocho exhibiciones por separado que conforman la colección permanente. En otra sala del museo se organizan varias exposiciones itinerantes y temporales. El museo es altamente interactivo, de manera que resulta muy interesante para los niños. La información está disponible en inglés y español.
Descubre los principios de la arqueología en las primeras tres salas del museo. Aquí aprenderás acerca de la arqueología submarina, urbana y de campo. Investiga el contexto de tres de las excavaciones más importantes de la región: Lucentum, Petracos e Illeta. Una vez que domines los métodos para desenterrar culturas antiguas, será momento de explorar las siguientes cinco salas. Da un vistazo a la geografía local de Alicante antes de profundizar en sus periodos históricos clave: la prehistoria, el periodo íbero, la era romana y la Edad Media. En la última sala, déjate cautivar por las influencias sociales, culturales y ambientales que estos periodos tuvieron en la edad moderna y contemporánea.
En todo el museo, la información se despliega en una serie de dispositivos multimedia. Muchas de las exhibiciones te permiten "interactuar" con los residentes originales de la ciudad. Se trata de un museo académico que fomenta la participación de los niños y que al mismo tiempo, resulta interesante para quienes desean conocer más a fondo la historia de España, así que es un lugar atractivo para toda la familia.
El Museo Arqueológico de Alicante se ubica afuera del centro de la ciudad y hay una parada de tranvía especial para llegar aquí. Si llegas en coche encontrarás dónde estacionarte cerca de aquí. El museo cierra los lunes. Para entrar es necesario pagar una pequeña cuota de admisión.