La Cappella Sansevero es una capilla del siglo XVI en Nápoles, que cuenta con una diversa colección de arte religioso italiano. La capilla fue construida por un Duque local, Giovan Francesco di Sangro, como agradecimiento a la virgen María por curar su enfermedad. Podrás ver las delicadas piezas de escultura de mármol en exposición, incluido el Cristo velado. También hay frescos, un piso de mármol elaborado, y obras de arte gráficas anatómicas poco comunes.
Te tomará una hora visitar el lugar. La capilla es adecuada para familias. Sin embargo, es posible que algunas de las piezas expuestas resulten perturbadoras para los niños más pequeños. El Cristo velado es la obra de arte más famosa de la capilla. Esta obra de 1753 ilustra a Jesús, ya fallecido, acostado y cubierto con un ligero velo. Admira el gran detalle de esta obra con los suaves pliegues del velo, así como las marcas de la crucifixión en las manos y pies. El artista, Giuseppe Sanmartino, es famoso por la forma en que trabajó el mármol para que el velo pareciera ser transparente.
Varias otras estatuas del siglo XVIII completan la colección de la capilla. En la bóveda, admira los colores y gran detalle del fresco de Maria Russo Gloria del Paraíso. En el piso, busca las piezas del piso original. El diseño parece un laberinto, creado con piezas de mármol blanco y negro. La obra, por Francesco Celebrano, simboliza el camino difícil hacia la iluminación.
Baja las escaleras para visitar la cámara subterránea y ver la obra más inusual de la capilla, lasMáquinas anatómicas. Dos cuerpos, de un hombre y una mujer, se encuentran parados en vitrinas. Los sistemas venoso y arterial, así como los huesos y dientes, están completamente intactos. No se sabe cómo el artista, Giuseppe Salerno, pudo preservar en tan buen estado, el sistema circulatorio. Hoy día, da una impresión escalofriante, sin embargo, extraordinaria.
La capilla Sansevero se encuentra en el centro histórico de Nápoles, a cinco minutos de la Piazza San Domenico Maggiore. La estación de metro más cercana es Piazza Cavour. Camina hasta la Piazza San Domenico Maggiore si buscas cafés y restaurantes. La capilla está cerrada los martes. Se cobra la entrada, sin embargo los menores de 10 años entran gratis.