Seúl es una ciudad relativamente moderna, pero el Palacio Gyeongbok es una de sus excepciones. El palacio fue construido originalmente en 1395 y, como residencia de la dinastía Joseon, fue uno de los lugares más importantes del país. En la actualidad, casi la mitad de él ha sido restaurado y devuelto a su antiguo esplendor y es hoy un excelente ejemplo de la cultura coreana tradicional.
El complejo ha pasado por tiempos difíciles. Fue destruido por primera vez durante la invasión japonesa a fines del siglo XVI, y después fue nuevamente demolido por el Imperio Japonés en el siglo XX. Aún se trabaja en restaurar los alrededor de 300 edificios que componían el palacio original.
Gwanghwamun, en la parte sur, es la puerta de acceso principal del complejo, y es por allí que entra la mayoría de los visitantes. También es el lugar donde puedes ver la ceremonia del cambio de guardia, la cual tiene lugar cada hora durante el día. Otros atractivos principales del complejo palaciego incluyen al salón Gangnyeongjeon (donde solían vivir los reyes), el salón de banquetes real y el bello Hyangwonjeong, una de las únicas estructuras sobrevivientes del siglo XIX.
Necesitarás por lo menos una hora para recorrer el palacio. Aprende más acerca de Gyeongbok en uno de los recorridos guiados gratuitos que salen de la oficina de información dentro de la puerta Heungnyemun en algunos momentos del día. Conoce más de la historia de Corea en el Museo Nacional del Palacio, al sur de la puerta Heungnyemun, y en el Museo Folclórico Nacional, dentro del propio Hyangwonjeong. Ambos museos contienen grandes colecciones de objetos coreanos y también cuentan con explicaciones para personas que hablen inglés.
A pocos pasos del norte del Palacio Gyeongbok se ubica la actual sede del gobierno sudcoreano, la Casa Azul. Es la residencia del jefe de estado. Aunque es necesario hacer una reservación para recorrerla, también vale la pena admirar su exterior. Los pabellones tradicionales con tejas de color azul y el paisaje montañoso de fondo son una vista excelente para tomar fotografías.
Para llegar al Palacio Gyeongbok, puedes tomar el metro hasta las estaciones de Gyeongbokgung o Gwanghwamun. El complejo palaciego abre todos los días, excepto los martes. Puedes comprar un boleto en paquete, el cual incluye el acceso a otros tres complejos de grandes palacios y al santuario Jongmyo.