Hemos estado tres noches aquí y lo hemos pasado muy bien. La casa es cómoda, con baño en cada dormitorio, todo muy limpio. La cocina nos hubiera gustado que fuera más grande, es muy pequeña, pero bien equipada. La ubicación excelente, justo en la plaza del pueblo y al lado de la plaza de la iglesia. Es un pueblo chiquitín pero bonito, con cosas cerca para ver. Las personas que llevan la casa rural son muy amables y también la señora que vive en la casa a la que pertenece la piscina. La piscina está a 10 minutos andando y está muy bien.
En resumen, tanto los niños como los adultos hemos disfrutado mucho.