Con sus cuevas aisladas, sus olas suaves y su arena blanca inmaculada, la Playa Navío es una auténtica joya para los fanáticos del sol. La playa está flanqueada por bellos acantilados verdes, por lo que puedes tomar fotos excelentes. Deja que tus hijos jueguen en el agua espumosa de esta playa poco profunda.
Trae un camastro y toma el sol en este santuario de arena relajante. Camina de un lado a otro de la playa y disfruta la vista de la bahía. La parte posterior de la playa está rodeada de palmeras y plantas de uva de mar.
Dirígete a las cuevas ocultas que se encuentran al otro lado de los acantilados. Sube a las rocas y busca un escondite secreto para ti y tu pareja. Observa a los temerarios que saltan desde los acantilados hacia el mar.
Lleva tus botanas y refrescos a la playa y coloca una manta para disfrutar un picnic soleado. Refréscate con un buen chapuzón en el agua tibia y tranquila del mar Caribe. Contempla la gran variedad de tonos azules en el agua. El mar suele estar bastante tranquilo en esta zona y las olas pequeñas atraen a los surfistas principiantes. Trae unas tablas de boogie para que los niños jueguen en el mar. Las olas son un poco más intensas en el lado suroeste de la playa.
La playa está abierta al público todo el tiempo y el acceso es gratuito. Ten cuidado cuando estés en el agua, pues no hay salvavidas en esta playa.
La Playa Navío se encuentra en un promontorio que sobresale de la parte sur del centro de la isla de Vieques. Renta un auto y conduce hacia el sur de Isabel II durante 20 minutos para llegar aquí. La carretera de terracería puede quedar bloqueada durante la temporada de lluvias, que es de abril a noviembre. Visita otros lugares de interés en la región, como la bahía bioluminiscente de Puerto Mosquito, Punta Negra y el Balneario de la Bahía del Sol.
