La Playa El Socorro es una bella franja de arena negra ubicada en una bahía, sobre la costa rocosa de Tenerife. El agua y el ambiente tranquilo es ideal para las familias, mientras que el rompeolas que está después del arrecife la convierte en una playa popular entre los surfistas. Diviértete con diferentes juegos en la playa o practica surf durante el día y disfruta una película en el cine al aire libre que se organiza en las noches de verano.
La arena oscura de la Playa El Socorro es típica de las playas del norte de Tenerife, donde el paisaje volcánico genera un terreno que parece de la luna. Durante la temporada alta de verano, los turistas y los habitantes de la región se dirigen a esta playa para ver las películas que se proyectan en las enormes pantallas al aire libre. También hay wifi en varias partes de la playa, por lo que te puedes mantener conectado.
Coloca una manta y relájate en la arena. Trae tu libro favorito o relájate en esta zona mientras escuchas el sonido suave de las olas. Participa en algunos juegos de playa o simplemente observa a los demás. Observa los frisbees que vuelan por la zona y los partidos de racket ball. Si quieres, trae tu propio balón para jugar fútbol en la arena.
Los fanáticos del surf pueden nadar más allá del arrecife para montar las olas que rompen cerca de la playa. Puedes tomar clases de surf con un instructor experto de la región. Los nadadores deben tener cuidado, pues las corrientes pueden ser bastante intensas en esta zona. Los salvavidas vigilan la playa durante la temporada alta.
Después de pasar el día en la playa, utiliza las regaderas y los baños y prepárate para disfrutar una buena comida o cena. Trae tus propios alimentos y bebidas refrescantes o pide algunos platillos en el restaurante bar que está en los alrededores. El menú incluye tapas y paella, así como varias cervezas refrescantes.
La Playa El Socorro recibió el famoso premio Blue Flag. La playa está ubicada en Los Realejos, a unos 40 minutos en auto de Santa Cruz. Hay estacionamiento disponible. Disfruta la vista panorámica durante el camino hacia la playa, que pasa junto a algunas plantaciones de plátanos y varias haciendas, así como por una carretera costera donde las montañas se unen con el mar.