Siéntate en uno de los cafés de la plaza Grote Markt y disfruta de un rico chocolate o una refrescante cerveza belga, mientras ves pasar a las personas por el centro histórico de Amberes. La plaza principal de la ciudad está rodeada por obras arquitectónicas del siglo XVI y la impresionante fuente de Brabo se eleva en el centro. A los lugareños les encanta visitar los cafés, las tiendas y los restaurantes alrededor de la plaza.
Al oeste, el Ayuntamiento de la ciudad domina el paisaje. Fue construido en 1565 y representa un buen ejemplo de la arquitectura renacentista en Bélgica, con elementos tanto flamencos como italianos. Contempla los arcos de ladrillo en la base, que alguna vez fueron los umbrales de docenas de pequeñas tiendas. En los niveles superiores, dos filas de columnas le dan al edificio un aspecto más romano.
En el centro de la plaza se eleva la imponente estatua de Brabo, la figura mítica más importante de Amberes. Cuenta la leyenda que Brabo mató al gigante que cobraba tarifas excesivas a quienes deseaban entrar a la ciudad en bote. La estatua lo muestra lanzando la mano del gigante a las aguas del río Scheldte.
Las casas de los diferentes gremios, que datan de principios del siglo XVI, rodean la plaza. Desafortunadamente, estas son recreaciones de las originales, que fueron destruidas durante un incendio. Estas reconstrucciones se llevaron a cabo en el siglo XIX, lo cual explica las lujosas decoraciones en las fachadas. Trata de encontrar las estatuas doradas en los techos de varias casas.
Visita una tienda de chocolate y prueba algunas muestras y, a la hora de la comida, deléitate con un plato de mejillones y una rica cerveza artesanal. Al caer la noche, los edificios se iluminan y la plaza adquiere una atmósfera romántica, ideal para una caminata nocturna o una cena íntima.
Si vienes en diciembre, podrás encontrar regalos o recuerdos en los mercados navideños que se ponen cada año. Además, podrás aprovechar la pista de hielo que se instala cada invierno. Renta unos patines y deslízate al pie de algunos de los edificios más antiguos de la ciudad.
La plaza permanece abierta todo el año. Queda a una corta distancia de muchas otras atracciones de Amberes, así que puedes recorrer la ciudad a pie fácilmente. La entrada es gratuita.