La isla de Ponza, con su forma de media luna, es un tesoro poco conocido de la costa oeste de Italia. Explora los diferentes pueblos separados por montañas y viñedos, y rodeados por las hermosas playas del mar Tirreno. Su encanto proviene de los rincones y los escondites hechos por los romanos en los acantilados. Tomen sol en la costa y sumérgete en el agua transparente.
Llega al Porto di Ponza, que es el puerto ubicado en la parte sureste de la isla. Lo primero que puedes ver desde aquí son los tonos rosa claro, azul, blanco y anaranjado de los edificios amontonados. Visita los diferentes restaurantes y bares con vista al mar que están ubicados en la parte más animada de la isla.
Uno de los sitios más famosos de la isla son las cuevas de Grotte di Pilato, una intrincada red de túneles y fosas de agua ubicadas en las ensenadas marinas. Los romanos construyeron las cuevas cerca de lo que actualmente es el puerto, posiblemente con el fin de criar anguilas morenas. Renta un bote para llegar a la impresionante estructura ubicada cerca de lo que actualmente es el puerto y contempla los restos de la villa romana y sus fortificaciones.
Observa las grutas azules, construidas por los etruscos antes de la época romana. Visita la Gruta de las Serpientes y la Galería Romana, que conectan al puerto con otras partes de la isla.
La isla se ha utilizado históricamente como un sitio de exilio, a donde los romanos desterraban a los miembros de la realeza. Muchos siglos después, el régimen fascista de este país exilió a los presos políticos. Uno de los personajes enviados aquí fue el dictador Mussolini.
Los meses de julio y agosto son los más calurosos y secos, aunque los inviernos templados y agradables son ideales para hacer largas caminatas por la costa.
La isleta es la mayor del archipiélago de las Islas Pontinas en el oeste de Italia. Está a 33 kilómetros (21 mi) del cabo Circeo, en la costa oeste de Italia. Puedes trasladarte hacia la isla desde varios puertos, como Nápoles, Terracina, Formia y Anzio. Si tomas un vuelo hacia Roma, puedes viajar en auto o en tren hacia los puertos.
En esta zona, los meses de julio y agosto son los más calurosos y secos, aunque los inviernos templados y agradables son ideales para hacer largas caminatas por la costa. El fantástico clima y las hermosas vistas de Ponza pueden hacer que el exilio parezca un sueño.