La ciudad de St. Andrews se encuentra en la Bahía de Fundy, que va desde Nuevo Brunswick hacia Nueva Escocia. Camina tranquilamente por las calles de esta bella ciudad y respira el aire salado refrescante. El patrimonio bien conservado ha convertido a la ciudad en un distrito histórico nacional.
La arquitectura majestuosa de muchos edificios muestra que en esta región vivían muchas personas adineradas e influyentes. Hospédate en el Algonquin Resort, un edificio estilo Tudor que es uno de los resorts de servicio completo más grandes del este de Canadá. Este sitio ha estado abierto al público durante más de 100 años. Juega una ronda de 18 hoyos en el Campo de Golf de Algonquin, un campo de clase mundial que cuenta con vista a la Bahía de Passamaquoddy.
St. Andrews by-the-Sea, como se le conoce cariñosamente, es una ciudad marítima con muchas actividades familiares fascinantes y experiencias únicas. Visita la Bahía de Fundy, que cuenta con los niveles de marea más extremos del mundo. Algunas áreas registran una diferencia de más de 16 metros (52 ft), que es más que un edificio de cinco pisos, entre las mareas altas y bajas.
Viaja en auto por el fondo del océano durante la marea baja para llega a la Isla Ministers. En este sitio histórico, visita la casa de 50 habitaciones donde vivió el barón ferroviario Sir William Van Horne. Aborda un barco en el muelle principal de St. Andrews para contemplar la magnificencia de los gigantes del océano en un crucero de observación de ballenas.
Visita una playa de arena blanca en Katy's Cove. Compra artículos regionales en las tiendas, boutiques y galerías de arte ubicadas a lo largo de la calle Water. Disfruta la tranquilidad en el Jardín Kingsbrae, que tiene una extensión de 11 hectáreas (27 acres) y cuenta con una cafetería que ofrece comidas ligeras en la terraza, con vista a la bahía y la Isla Ministers. El jardín está abierto desde mediados de mayo hasta mediados de octubre.
Organiza una excursión de un día, con un viaje en ferry incluido hacia el Parque Internacional Roosevelt Campobello de Maine, donde Franklin D. Roosevelt, el antiguo presidente de los Estados Unidos, tenía una cabaña que le encantaba. Su gusto por esta zona es comprensible, pues este parque de 1,100 hectáreas (2,800 acres) tiene una belleza natural impresionante. Prepara tu cámara al visitar el Faro de St. Andrews en Pendlebury, que está frente a la Isla Navy.