La Torre de Manaca Iznaga forma parte de una propiedad que solía ser de Pedro Iznaga, un antiguo barón de la importante industria azucarera de Cuba. Sube a la torre para disfrutar la vista excelente de la campiña. Iznaga, un personaje importante del tráfico de esclavos cubanos, utilizaba la vista de la torre para sus intereses comerciales relacionados con el azúcar.
Conoce la historia fascinante de la industria azucarera de la región, que fue una parte muy importante del desarrollo económico de Cuba desde finales del siglo XVIII hasta finales del siglo XIX. Una gran parte del trabajo de esta industria manual la realizaban los esclavos traídos a Cuba desde África y sus descendientes nacidos en el país. Debido a que los esclavos estaban obligados a trabajar en la plantación contra su voluntad y el propietario de la plantación temía que se rebelaran, la torre les permitía a los guardias de la plantación supervisar las actividades de los esclavos en toda la finca.
La esclavitud se abolió en Cuba en 1886 y la industria azucarera disminuyó a lo largo del siglo XIX y a principios del XX. Visita la hacienda Iznaga y otras partes del Valle de los Ingenios para ver los restos de los 50 molinos que existieron durante el apogeo de la industria.
Camina por el sendero hacia la Torre de Manaca Iznaga y detente en los puestos donde los artesanos locales venden sus productos. La base de esta torre de cuatro lados es lo suficientemente ancha para permitir el paso de vagones por su entrada arqueada. Las escaleras de metal suben seis niveles, cada uno de los cuales tiene una plataforma de observación. Paga la cuota para subir a la cima estrecha de esta torre de 44 metros (144 ft) de altura y observa la finca, las palmeras, las pequeñas zonas de caña de azúcar restantes y las aves rapaces.
Visita otras partes de la finca cerca de la torre. Disfruta una buena comida en la mansión de Iznaga, observa la campana que se usaba para llamar a los esclavos que estaban en los campos y contempla la gran prensa de azúcar.
Viaja en auto o en bicicleta hasta la finca y la Torre de Manaca Iznaga, que se encuentran a unos 16 kilómetros (10 mi) al este de Trinidad. También puedes disfrutar una experiencia única al viajar hasta aquí en un tren de madera que atraviesa la campiña. La torre está abierta todos los días. Los trenes salen de Trinidad a partir de la media mañana.