Con una hermosa playa y varios senderos agradables para caminar en los alrededores, Trinidad es una ciudad colonial española bien conservada que ofrece unas vacaciones que combinan la historia con el descanso.
Cruza el puente levadizo de esta fortaleza para ver los cañones y morteros y contemplar los objetos fascinantes que se exhiben en el Museo de la Navegación.
Disfruta una buena comida en los restaurantes junto al lago, pasea por los jardines bien cuidados, observa diferentes tipos de aves y realiza una gran variedad de actividades recreativas en este bello parque.
Este edificio de color amarillo brillante ubicado cerca de la Plaza Mayor cuenta con varios ejemplos de las riquezas más impresionantes del pasado de la ciudad.
Explora las plantas inferiores de esta antigua oficina central de una productora de ron confiscada por el gobierno después de la revolución de la década de 1960.
Una de las mansiones más antiguas de la época dorada de la ciudad se ha convertido en un museo donde se muestran los objetos más elegantes de la etapa próspera de producción de azúcar de Trinidad.
Disfruta una buena comida en los restaurantes junto al lago, pasea por los jardines bien cuidados, observa diferentes tipos de aves y realiza una gran variedad de actividades recreativas en este bello parque.