La playa más famosa de Río de Janeiro es más que solo eso, es el sitio donde los habitantes locales y los turistas de todo el mundo vienen a relajarse, pasear y pasar un buen rato.
Visita Fernando de Noronha para observar los fuertes en las colinas y las sombras de las formaciones rocosas al atardecer. Nada con las criaturas marinas de colores en el océano.
Salvador es una ciudad costera muy animada que cuenta con un barrio antiguo majestuoso, museos de arte fantásticos, playas inmaculadas y festivales geniales que celebran sus raíces afrobrasileñas.
Visita la región de la Pampa para ver los sitios principales de Buenos Aires y Córdoba, y explora las praderas llenas de plantas y animales fascinantes.
Esta ciudad, que fue capital del Imperio Inca, es la entrada al Valle Sagrado de esa civilización y uno de los sitios más importantes de la cultura indígena peruana.
Visita la capital del vino de Sudamérica para probar delicados Malbecs, estudiar la cultura argentina y disfrutar de un paisaje que no dejará de sorprenderte.
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Observa las impresionantes formaciones rocosas y observa a las tortugas que anidan en este paraíso para surfistas que cuenta con algunas de las mejores olas del país.
Esta animada ciudad es el principal centro de transporte del Valle Sagrado y cuenta con una excelente infraestructura turística que la convierte en el punto de partida ideal para explorar la región.
La ciudad norteña de Jujuy es el punto de acceso al corazón indígena de Argentina y cuenta con monumentos de la era española, excelentes museos y restaurantes fabulosos.
Esta montaña que emerge del centro de la ciudad es conocida principalmente como la sede de la emblemática estatua de Jesús, del tamaño propio de un rascacielos, en Río.
Contempla las tonalidades de rojo, rosa y amarillo en el terreno surreal de Purmamarca, un bello pueblo ubicado entre las montañas de la Quebrada de Humahuaca.
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