El día comienza en Roma, donde tomarás un tren de alta velocidad a Salerno con tu grupo de viajeros y un guía turístico. Desde allí, súbete a un ferry que te llevará a lo largo de la impresionante costa de Amalfi.

La primera parada es Amalfi, donde se dirigirá a un precioso huerto de limoneros de gestión familiar. Camina por las hileras de fragantes limoneros solo con tu pequeño grupo mientras descubres la tradición regional del cultivo del limón. La granja se alza sobre la ciudad y ofrece impresionantes vistas al mar. Después de su recorrido por el huerto, apreciará más profundamente la degustación de limoncello. Saborea el licor dulce y picante que se produce en la granja. Después de la degustación, aproveche el tiempo libre para explorar la ciudad y, si le gustó lo que probó, compre un poco de limoncello para llevar a casa.

Embárcate en otro viaje en ferry a lo largo de la épica costa hasta tu próxima parada, la ciudad vecina de Positano, un pequeño pueblo de pescadores que durante mucho tiempo ha sido el destino vacacional preferido de personalidades, desde los poetas románticos del siglo XIX hasta las estrellas de Hollywood actuales. Después de una caminata de orientación con su guía, tendrá dos horas de tiempo libre. Recorre las boutiques repletas de ropa de playa de fama mundial, haz que te hagan sandalias de piel a la medida de tus pies o disfruta de un almuerzo con delicias locales en una cafetería junto al mar (costos no incluidos). No olvides traer tu bañador, ya que no hay nada mejor en un día de verano que darse un chapuzón en el mar.

Una vez que hayas conocido Positano, regresa al barco para un crucero de regreso a Salerno, donde tomarás el tren de regreso a Roma.