Visite el lado brasileño del Parque Nacional Iguazsu, que junto con el lado argentino desde el sistema de cascadas más grande del mundo y una de las Nuevas 7 Maravillas de la Naturaleza.

Comience su visita al lado brasileño del parque en el Centro de Visitantes para aprender más sobre el parque. Sigue una carretera de 11 km (6 mi) para comenzar tu experiencia. Una vez en el camino podrás escuchar las caídas mientras observas el denso bosque y su rica fauna y flora. Durante el recorrido, observe muchas especies de aves, mariposas multicolores e incluso pequeños mamíferos como coatis (Nasua). En la pasarela destinada a la caída Benjamin Constant y Deodoro, disfrute de la vista de la colosal Garganta del Diablo, la cascada de 80 metros de largo que ostenta el título de mayor caudal de agua. Siguiendo por la pasarela de la caída Floriano, se encuentra un elevador panorámico que conduce a un nuevo ángulo de las cataratas. Después de subir, disfrute del centro gastronómico Porto Canoas (comida no incluida) y de la tienda de souvenirs del parque.

Tu segunda aventura comienza en el Macuco Safari. Tome la carretera en un automóvil remolcado al aire libre que permite una vista despejada del bosque. Vea las orquídeas, bromelias, árboles centenarios e incluso animales salvajes. Una vez que termines el paseo en auto, dirígete al Porto Macuco, donde te estarán esperando los botes flotadores. Después de ponerte tu chaqueta, navega por el río Iguazú para observar los cañones y enfrentar el flujo a una velocidad que permita disfrutar de los paisajes y tomar fotos. Alcanza la base de las cataratas, lo suficientemente cerca de la colosal Garganta del Diablo, la caída más grande de todo el complejo. Las rocas, los animales, el cielo azul, los arcoíris, la neblina y el agua juntos caracterizan el espectáculo con su punto culminante en las cataratas de los Tres Mosqueteros. El barco se acerca lo suficiente como para que todos disfruten de un breve baño en las refrescantes aguas, ¡es una emoción indescriptibles!