De camino a Szentendre, puede hacer una breve parada en la costa y las ruinas de Roman. Su guía le hará sugerencias sobre las mejores galerías y museos para visitar, así como qué comidas locales probar.
Camina por el centro barroco de la ciudad, serpenteando por sus calles estrechas y callejones construidos a partir de las ruinas medievales. Después de explorar la belleza oculta de la ciudad, disfrute de uno de los museos. Pruebe un sabroso langosh, un famoso pastel local o un famoso helado local. Pase algo de tiempo libre comprando y explorando el arte y la cultura de la ciudad antes de regresar a Budapest.