Este recorrido lleno de diversión le brinda la oportunidad de adentrarse en algunos de los mejores lugares de Boa Vista. Pase una mañana explorando pueblos del interior y recorriendo el desierto de Viana en un 4x4, antes de terminar en una de las playas más bonitas de la isla. Roberto, uno de nuestros guías locales, dice: «Probablemente no era su intención, pero las tiendas de recuerdos de Povoação Velha y Rabil se han convertido involuntariamente en estrellas de las redes sociales. Sus exhibiciones coloridas, kitsch y despreocupadas son éxitos masivos en Instagram».
Esta aventura que dura toda la mañana comienza con una visita a la casi derruida iglesia de San Roque del siglo XIX en Rabil, la segunda ciudad más grande de Boa Vista. Necesita un poco de pintura y tiene una decoración sencilla, lo que refleja la dura historia de la isla. Luego te diriges a una fábrica de cerámica, donde verás las obras de los artesanos locales y tal vez puedas llevarte un recuerdo de la cerámica local. También podrá probar el plato nacional de Cabo Verde, la catchupa, un rico guiso de maíz, frijoles, carne de cerdo y verduras, mediante el cambio de ingredientes, no solo de una isla a otra o de un pueblo a otro, sino de una casa a otra.
A continuación, agárrate fuerte mientras recorres el polvoriento paisaje del desierto de Viana. Nuestra siguiente parada es Povoação Velha, el asentamiento más antiguo de la isla. Pasea por sus calles rústicas antes de relajarte en la playa de Santa Mónica, de 11 km de longitud. Su arena blanca como el azúcar contrasta con las aguas azules fluorescentes como una imagen de una postal. Si eres un buscador de aventuras, puedes incluso probar suerte en el sandboard.