Visita los bares icónicos del barrio más famoso de San Sebastián para disfrutar de los pintxos imprescindibles que no puedes irte sin probar. En una meca gastronómica como San Sebastián, hay algunos lugares de los que no puedes irte sin probarlos, y los visitaremos todos esta noche. Ven con nosotros a la sede de pintxos de San Sebastián, el casco antiguo, donde hemos elegido cuidadosamente los mejores bocados que la ciudad tiene para ti. A medida que avanzamos, te enseñaremos qué hacer y qué no hacer. —para que puedas enfrentarte con éxito a la escena de los pintxos durante el resto de tu viaje.

Empezaremos en un bar que ha sido uno de los favoritos locales desde la década de 1970. Aquí probarás una selección de los mejores mejillones de la ciudad con sidra vasca seca. ¡Domina el proceso de verter sidra desde una altura directamente en tu vaso y aprende todo sobre el fenómeno cultural del «TXOTX»! Esta parada tradicional será tu primera introducción a lo que realmente significa salir de pintxos en San Sebastián.

A continuación, te sumergirás en el fascinante mundo del manjar más famoso de España: el jamón ibérico curado. Te presentaremos una joya familiar repleta de productos gourmet vascos y españoles. Prueba dos de los jamones curados más famosos (y más caros) elegidos especialmente por nuestro amigo Sylvain. Cuando nos vayamos, ya habrás comprendido las diferencias entre ellos, ¡y tendrás un favorito!

A una cuadra de la plaza encontrarás un bar donde hacen las mejores anchoas marinadas en casa que hemos probado. Y si crees que no te gustan las anchoas, espera. Este bar ha hecho cambiar la opinión de muchos que dudan de las anchoas, ¡y puede que tú seas el próximo! En el bar de Manu y Josu también conoceremos la historia del primer pintxo que se inventó y degustaremos un vino espumoso regional.

A continuación, visitaremos uno de los bares de pintxos más famosos de la ciudad, donde el pasado se encuentra con el presente. Aquí, los mejores ingredientes locales y las técnicas de cocina innovadoras ayudan a que los pintxos brillen de verdad.

Después de esto, es hora de otro de los favoritos locales: uno de los lugares de moda de hoy en día para disfrutar de un bistec a la parrilla. Disfrutarás de un pintxo de solomillo tierno, acompañado de una copa de vino de Navarra envejecido en barrica.

Por último, pero no menos importante, visitaremos un restaurante que ha estado abierto desde la década de 1950. ¡Probarás un postre verdaderamente local que solo puedes encontrar aquí, acompañado de un vino dulce!