Comenzamos nuestro recorrido por Viena en una de las calles comerciales más famosas y atractivas de la ciudad: The Graben.
Sería grosero de nuestra parte no ofrecerle un café y un desayuno ligero antes de empezar correctamente. Así que, después de nuestro breve paseo, nos detendremos para tomar un café rápido, strudel.
Si bien el Naschmarkt es una visita obligada, cualquier lugareño te dirá que rara vez lo visita, a menos que quiera pelear con los turistas por la atención del vendedor. En cambio, cada local tiene su propio mercado que le gusta visitar, puede que no sea tan grande como el Naschmarkt, pero sin duda es más animado y menos turístico.
En nuestro primer mercado local, disfrutaremos de nuestro primer almuerzo, donde disfrutaremos de una maravillosa comida típica austriaca (escalope, gulash o una opción vegetariana, por ejemplo) y la acompañaremos con vino o cerveza de producción local. También le mostraremos el lado dulce de Viena y le obsequiaremos con el mejor postre del chef.
Independientemente del mercado, una cosa que podemos prometer es que habrá comida. Nuestros guías le presentarán algunos de los placeres vieneses, tanto dulces como salados, y la vida en las calles que ninguna guía mencionaría nunca. Si hace una pausa para disfrutar de la vida de Wurstelstand, tendrá la oportunidad de probar el plato favorito de los austriacos (una pista: no es escalope).
A lo largo del camino, nos sumergiremos en la famosa cultura cafetera vienesa. Las cafeterías han desempeñado un papel muy importante en la configuración de la cultura de la ciudad a lo largo de los siglos, y la primera taza se elaboró en 1683. El Inventario Austriaco del Patrimonio Cultural describe las cafeterías como lugares «donde se consume tiempo y espacio, pero solo el café aparece en la factura». Le mostraremos dónde encontrar una maravillosa taza de café o té, o lo que su corazón desee después de un maravilloso día de comida.
Nuestra introducción a la escena gastronómica y de bebidas de Viena termina en el centro de la ciudad, frente a la Ópera, el lugar perfecto para empezar y seguir las numerosas recomendaciones que nuestros guías le darán. O tal vez simplemente desee retirarse a tomar una descarada siesta en su hotel; si es así, su guía puede ayudarlo con las indicaciones.