Mientras navegamos por este impresionante fiordo, su capitán y su guía harán varias paradas, lo que le permitirá absorber la belleza del paisaje y aprender datos interesantes sobre la historia del fiordo y sus habitantes.

Al final del fiordo desembarcamos en el encantador pueblo sin carreteras de Botnen. Hacemos una caminata tranquila a través de un fascinante paisaje cultural, que conduce al mirador aislado, «Furehaugen», situado a 180 metros sobre el nivel del mar. Esta caminata es tan aislada que solo tiene alrededor de 100 visitantes al año.

Después de descender de nuevo a la orilla del fiordo, concluiremos el recorrido conduciendo de regreso al punto de partida, dejándote recuerdos de una aventura extraordinaria.