El Antiguo Ágora fue alguna vez el mercado central y el corazón de la antigua Atenas. Sus paseos cubiertos estaban flanqueados de tiendas y estatuas. Pasea por los jardines hermosamente conservados y explora las ruinas que están llenas de frisos que describen a los dioses y mitos de la antigua Grecia.Es fácil imaginar a Sócrates y Platón hablando debatiendo sus posturas filosóficas en este lugar.
Fácilmente puedes pasar toda una mañana o tarde explorando los templos y antiguos paseos donde los atenienses más acaudalados solían intercambiar rumores, noticias sobre política y bienes diversos. El Ágora fue utilizado para realizar actividades comerciales, políticas, militares y religiosas. Aunque alguna vez existieron nueve templos en este lugar, la Aghioi Apostoloi es la única que permanece en su sitio.
Aunque la mayoría de los monumentos en el Ágora están acordonados para su conservación, podrás admirar su arquitectura de mármol y piedra caliza. En los jardines bellamente conservados verás especies de plantas que se han usado durante siglos, como los almendros, los mirtos y los árboles de granadas. Párate en el centro del Ágora para disfrutar de la vista espectacular que hay hacia la cúspide de la Acrópolis.
Pasea hacia la esquina noroeste del Ágora, en la cima del Kolonos Agoraios, para encontrar uno de los templos dóricos mejor conservados de Grecia, el Templo de Hefesto. Cuenta con 34 columnas griegas clásicas y mide 32 metros (104 pies) de largo. Hefesto, el dios patrono de la metalurgia y los artesanos, protegió a los muchos alfareros y trabajadores de metales que tenían sus negocios en esta área del Ágora.
Asegúrate de visitar las laderas detrás del templo, en donde podrás explorar ruinas arqueológicas medio cubiertas por una exhuberante vegetación. Tal vez, Simón el zapatero tenía su taller en este lugar. Este famoso lugar de encuentro para Sócrates y sus estudiantes estaba en el Ágora, aunque nadie sabe exactamente dónde.
El Antiguo Ágora está en el centro de la ciudad y puedes llegar a él en transporte público. La admisión está cubierta en el precio de entrada a la Acrópolis, y el sitio está abierto todos lo días.