Descubre los vestigios del pasado colonial de la ciudad, en la Catedral del Espíritu Santo de Quetzaltenango. Maravíllate con el talento arquitectónico de los colonizadores españoles admira sus iconos sagrados y aprende acerca de las leyendas religiosas. La Catedral del Espíritu Santo de Quetzaltenango data de la década de 1530, aunque gran parte de la estructura actual fue construida a principios del siglo XX. La iglesia se encuentra en la esquina sureste del famoso parque central de Quetzaltenango.
Lo que más destaca de la iglesia es su fachada. Está muy bien conservada, y su creación fue encargada por Francisco Marroquín, el primer obispo de Guatemala. Ahí encontrarás intrincadas esculturas estilo barroco, y estatuas de figuras religiosas. Después de la puesta del sol, la fachada es iluminada con luces brillantes, y hace un elegante contraste con el cielo nocturno.
Detrás de la antigua fachada se encuentra la sección más nueva de la iglesia, que data del siglo XX. Dale la vuelta a toda la construcción para ver las cúpulas muchas de ellas están adornadas con ventanas en forma de arco y chapiteles. Adentro podrás encontrar una elegante nave y un brillante suelo que se asemeja a un tablero de ajedrez. En la capilla hay un icono de Nuestra Señora del Rosario, la santa patrona de Quetzaltenango. Una leyenda dice que el icono llegó a Quetzaltenango después de que un terremoto interrumpió la peregrinación desde Antigua Guatemala hacia Nueva Guatemala de la Asunción (hoy la Ciudad de Guatemala).
La Catedral del Espíritu Santo de Quetzaltenango está abierto todos los días y la entrada es gratuita. Como es un lugar activo de culto, para visitarla deberás vestirte adecuadamente y respetar a los devotos. Está permitido tomar fotos en el interior de la catedral.
La catedral se encuentra en el corazón del Centro Histórico de Quetzaltenango y está a pocos pasos de otras atracciones de la ciudad. El Teatro Municipal, con su estilo neoclásico, está a unos 10 minutos a pie. Los camiones llegan hasta el Parque a Centro América (Parque Central de Quetzaltenango) es el más animado de la ciudad. Echa un vistazo a los jardines decorativos, a las fuentes y a la colección de columnas estilo jónico que hay en el parque. Caminando por el Pasaje Enríquez, podrás sorprenderte con la impresionante galería estilo renacentista.