Por más de medio siglo, el cayo Grassy ha sido hogar de uno de los delfinarios más progresivos y comprometidos del país: el Centro de Investigación de Delfines. Las instalaciones constan de una serie de lagunas cerradas que abarcan más de 0.87 hectáreas (2 acres). Nada con delfines o aprende a comunicarte con ellos, a medida que descubres su carácter amigable y juguetón.
Este centro comenzó como una pequeña atracción vacacional, cuando un pescador local abrió un acuario al aire libre a un costado de la autopista de ultramar. En las décadas siguientes, el centro pasó por varias trasformaciones, y hoy en día lo opera un grupo de entrenadores, científicos y ambientalistas, que se esfuerzan por formar conciencia sobre la difícil situación de los delfines y lobos marinos.
Durante las vacaciones, este centro de investigación se convierte en una de las atracciones más visitadas de los Cayos de la Florida. Haz una reservación para nadar con los delfines, e incluso podrás sujetarte a ellos para dar un veloz paseo por el agua. Siente la suave piel de los delfines al acariciarlos con las manos. Durante la sesión aprenderás las señales que usan los entrenadores para comunicarse con estos mamíferos.
Puedes adquirir fotografías profesionales de tu experiencia en el centro, un hermoso souvenir de tu visita. Toma tus propias fotografías en las plataformas de observación, mientras contemplas a los animales jugar en la parte menos profunda de las lagunas.
Antes de irte, visita a los leones marinos, que al igual que los delfines, son amigables y juguetones. Después de secarte, haz una pausa en el café y consigue algo de beber o de comer. Los niños se divertirán en el área interior de juegos, mientras los papás saborean un sándwich o un café.
El Centro de Investigación de Delfines se ubica a un lado de la autopista de ultramar, en el cayo Grassy, y puedes llegar en coche. Hay estacionamiento gratuito disponible. Se cobra una tarifa de entrada y necesitas hacer reservación para interactuar con los delfines.