De entrada el hotel tiene buena apariencia, los espacios de piscina, restaurantes y gloriretas son muy buenos y limpios. El menú para cenar no es tan diverso, es el mismo del almuerzo y los precios son excesivos en mi opinión. El personal es amable pero podría serlo aún más, ya que no todos lo son. Con respecto a las habitaciones, necesitan modernizarlas, las camas no son cómodas, la televisión es pequeña, el aire acondicionado gotea y moja el suelo, y deja de funcionar después de unas horas, lo que hace que la temperatura de la habitación se eleve. El internet funciona muy bien y parece estar disponible en todo el hotel, la playa es muy bonita y cercana, los fines de semana es concurrido y hay actividades de entretenimiento. En conclusión creo que es el lugar perfecto para ir a pasar el día pero no para hospedarse.