Guirnaldas, aroma a incienso y música rodean al Santuario de Erawan, hasta donde las multitudes acuden para venerar a la estatua del dios Brahma. El número de personas que se reúne aquí es un reflejo de la gran importancia que la religión tradicional aún tiene en la Tailandia moderna.
El santuario recibe su nombre del legendario elefante de tres cabezas de la tradición hindú. Ubicado en un rincón discreto de la ciudad moderna, el santuario parece estar fuera de lugar por dos razones: la primera, porque está dedicado a un dios hindú en un país budista, y la segunda, porque se ubica en una de las intersecciones más transitadas de Bangkok. Los tailandeses adoptaron la tradición hindú de erigir santuarios en los sitios de construcción, y éste se encuentra en la base del Grand Hyatt Erawan Hotel.
El santuario fue construido en 1956 para auyentar a los malos espíritus que amenazaban con impedir la construcción del hotel, ya que estaban ocurriendo accidentes mortales y pérdidas importantes. Un astrólogo aconsejó que se construyera un nuevo santuario para el dios Brahma, y desde entonces se dice que el proyecto terminó sin más incidentes. Actualmente, la gente sigue venerando este santuario de la buena suerte. Desde lejos podrás percibir el aroma del incienso y ver las multitudes que lo visitan. Observa cómo los tailandeses de todas las clases sociales se detienen aquí para hacer una reverencia, traer ofrendas, cantar o bailar. Haz un donativo a los artistas o compra algunas flores para atraer la buena fortuna.
Aquí se invita a las personas a que realicen actos de caridad: por ejemplo, puedes pagar para liberar a un ave de su jaula o comprar un boleto de lotería a un vendedor discapacitado. Si solo vienes como observador, dirígete directamente al brillante dosel que cubre la estatua dorada de la deidad hindú con cuatro rostros y cuatro brazos. Los tailandeses llaman a este santuario Than Tao Mahaprom o San Phra Prom. La estatua actual es una réplica, ya que la original fue destruida casi por completo por un vándalo en 2006. Los testigos del hecho lincharon al perpetrador allí mismo, lo que sirvió como recordatorio de cuán sagrada es la estatua y de lo que puede sucederle a quienes no respeten el santuario.
El Santuario de Erawan se encuentra en el distrito de Pathum Wan. Para llegar aquí puedes tomar un taxi hasta la intersección de las calles Rajadamri y Phloenchit, o también puedes tomar el metro aéreo hasta la estación Chitlom.