Ubicada tras un parque nacional montañoso, en la costa del bellísimo lago Wanaka, esta ciudad turística ofrece deportes de ski, durante el invierno, y deportes acuáticos, durante el verano, además de asombrosos paisajes durante todo el año.
Descubre historias de romance y tragedia, contempla exóticos muebles victorianos y admira la maravillosa vista del mar en el único castillo de Nueva Zelanda.
Con arquitectura patrimonio de la ciudad, vibrante vida nocturna y una costa virgen, la “Edimburgo del sur” de Nueva Zelanda es una ciudad para cualquier temporada.
La iglesia más famosa de Dunedin, con su imponente diseño y sus grandiosos vitrales, es considerada el edificio del siglo XIX más destacado de Nueva Zelanda.
Con arquitectura patrimonio de la ciudad, vibrante vida nocturna y una costa virgen, la “Edimburgo del sur” de Nueva Zelanda es una ciudad para cualquier temporada.