Aprovecha al máximo la vida al aire libre en el valle de Gunnison. Gunnison-Crested Butte se destaca por su belleza sin importar la temporada. Los agrestes picos de las Montañas Rocosas enmarcan los cañones, los ríos, los amplios espacios verdes, y los relajados y amigables pueblos.
Crested Butte es un típico pueblo minero victoriano. Percibe la influencia de esa época mientras recorres las calles y observas la arquitectura victoriana. A pocos kilómetros fuera de la ciudad se encuentra Crested Butte Mountain Resort, donde podrás practicar ski y snowboard en el invierno, y senderismo, ciclismo y tirolesa en el verano.
Si quieres divertirte en familia, lleva a los niños a dar un paseo en un trineo de perros o en una motonieve. Dirígete a Adventure Park, ubicado en la base de la montaña, y prueba tu suerte con el bungee, el muro de escalada y las llantas para la nieve.
Disfruta de más deportes de invierno en el Crested Butte Nordic Center, que ofrece clases de ski cross-country al estilo nórdico y excursiones con raquetas de nieve por la zona rural. Trae tus patines de hielo y entra sin cargo a la pista de patinaje.
En el verano, podrás practicar ciclismo de montaña, acampar, pescar con mosca y cabalgar. Blue Mesa Réservoir es el espejo de agua más grande del estado y un famoso destino para ir de pesca, especialmente para atrapar variedades de trucha y salmón. El valle de Gunnison cuenta con el récord estatal de trucha común, arcoíris y de lago, y el récord estatal de salmón kokanee. La represa está ubicada no muy lejos del espectacular Cañón Negro del Parque nacional Gunnison, un lugar ideal para practicar senderismo y acampar. El valle de Gunnison también cuenta con 1,207 kilómetros (750 mi) de senderos para ciclismo de montaña, más que en cualquier otro valle montañoso del país.
Los encantos de la región no se limitan a las maravillas naturales. Participa de los “Días de ganaderos”, el rodeo más antiguo de Colorado. Este evento le rinde homenaje al histórico legado ganadero de la región.