El personal es increíblemente amable, y siempre tuvieron buenas recomendaciones para nosotros. El espacio en las habitaciones tipo tubo es un poco reducido, pero se entiende. El área esta bastante tranquila y cerca de restaurantes, la playa, el súper, y tiendas. Me sorprendió lo limpio que estaba todo, eso sí recomiendo llevar repelente para mosquitos, porque de esos hay UN CHINGO.
Tienen cobertores de cortesía, pero yo recomiendo llevar el propio. El desayuno sí bien esta incluido, esta un poco limitado, pero se compensa con la posibilidad de preparar tus propios alimentos. En general el lugar esta bastante acogedor, y el personal es cortes, amable y siempre esta dispuesto a ayudarte en lo que puedan, con una gasa, o para darte recomendaciones. Tengan cuidado con el gato, es sumamente cariñoso, juguetón y trepador, y luego cuando mueves el auto y sí esta acostado en el jardín no sabes sí mejor irte a pie para no molestarlo, cargarlo y acomodarlo en otro lado, acariciarlo o llevártelo:(. Una buena recomendación es llevar un poco de dinero extra, todo es algo costoso en la ciudad.